27 de diciembre de 2009

EL PELELE NO TIENE LLENADERA; ¿QUÉ OTROS AUMENTOS NOS ESPERAN ANTES DE QUE CONCLUYA 2009?

http://www.eluniversal.com.mx/img/2007/09/Fin/010gasolina1.jpg

El incremento, segundo en ocho días; la Magna queda en 7.80 pesos por litro

Decreta Hacienda otra alza de 3 centavos al precio de la gasolina

El gobierno incumple nuevamente el Acuerdo en Favor de la Economía Familiar y el Empleo

La Magna se mantiene por el momento en $9.57 y el diesel en 8.16, informa la Amegas

Israel Rodríguez J.
Periódico La Jornada
Domingo 27 de diciembre de 2009, p. 18

Entre la sorpresa y la indefensión de los consumidores, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) determinó aplicar este sábado un segundo aumento en ocho días al precio de la gasolina Magna, la más utilizada por el parque vehicular del país, ahora de 3 centavos por litro. De esta manera, las 8 mil 662 estaciones de servicio diseminadas en todo el país venden desde las primeras horas de ayer en 7.80 pesos el litro del combustible.

Con esto el gobierno federal nuevamente incumple su compromiso firmado el pasado 7 de enero en el contexto del Acuerdo Nacional en Favor de la Economía Familiar y el Empleo, en el cual el presidente Felipe Calderón había prometido que el precio de las gasolinas se mantendría congelado hasta concluir 2009.

Entre las 25 acciones que constituyen dicho acuerdo, signado por el Ejecutivo federal, destaca la de congelar los precios de las gasolinas en todo el país durante todo el año. El Banco de México (BdeM), el Instituto Federal Electoral y los partidos políticos firmaron como testigos ese compromiso.

Este es el segundo golpe a la economía familiar de los mexicanos durante apenas 18 días de gestión de Ernesto Cordero como nuevo secretario de Hacienda, en sustitución de Agustín Carstens, ahora nombrado como sucesor de Guillermo Ortiz al frente del BdeM.

Mientras las familias mexicanas se reponían de la fiesta navideña, disfrutan las vacaciones de fin de año y se preparan para recibir 2010, se despertaron este sábado con el aumento que el gobierno federal impuso de manera subrepticia: tres centavos al litro de la gasolina Magna, para pasar de 7.77 a 7.80 pesos por litro.

En el caso de la Premium se mantiene en 9.57 pesos el litro. El diesel, que aumentó la semana pasada 3 centavos, permanece en 8.16 pesos, informó la Asociación Mexicana de Empresarios Gasolineros (Amegas).

En lo que va del año la gasolina Magna ha registrado tres alzas. El primero fue el 3 de enero de 2009, cuando pasó de 7.70 a 7.72 pesos; el segundo ajuste fue el sábado 19 de diciembre (hace apenas 8 días), al subir de 7.72 a 7.77, y el tercero fue el aplicado ayer, al aumentar de 7.77 a 7.80.

Las alzas a los combustibles responden a la intención del gobierno federal de eliminar el subsidio a las gasolinas, que según los datos oficiales será para 2009 de alrededor de 138 mil millones de pesos. Ante la incapacidad de Petróleos Mexicanos (Pemex) de abastecer el mercado mexicano, la importación de éstas es de unos 321 mil barriles diarios, lo que representa alrededor de 45 por ciento del consumo local.

Según analistas financieros, el impacto de los incrementos se resentirá en mayor medida en 2010. Ese año se sentirán los efectos de los aumentos a combustibles, impuestos, derechos y alimentos.

ALGUIEN LE CREYÓ A ESTE PENDEJO CHISMOSO…


Estariamos mejor con….

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Para el 2010
Hernández

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Un avance, junto al continuado desplome




Antonio Gershenson

Hace unos días, primero, el tribunal colegiado respectivo ratificó la legitimidad del registro de la Unión Nacional de Técnicos y Profesionistas de Pemex (UNTPP) como sindicato. La Secretaría del Trabajo, a continuación, notificó a la unión el registro y tomó nota del mismo. Es un paso muy importante en una lucha cuyo primer paso, la formación del sindicato, se dio el 18 de marzo de 2008; pero cuyos antecedentes se remontan a movimientos que empezaron hace décadas.

Son muchos los problemas que quedan por resolver. Numerosos despedidos por ingresar a la unión o trabajar en ella. Ahora hay una nueva ola de despidos, que se anuncia llegarán en un plazo relativamente corto a unos 10 mil en Pemex. Éstos, junto con los 40 y tantos mil miembros del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME), despedidos de hecho el 10 de octubre pasado, no sólo muestran una forma de represión, sino que contribuyen a la crisis y al desempleo. Cada despedido deja de comprar lo que antes podía. Al igual que los otros despedidos, reduce su consumo al mínimo y contribuye a la reducción del mercado interno.

Por cierto, el registro a la unión es un precedente para el SME. Aunque el problema es diferente, ambos dependen, por lo menos en algunos aspectos, de la misma autoridad, e impulsan la organización independiente y la democracia sindical. Además, el despido es su enemigo común.

En estas páginas se publicaron declaraciones sobre la crisis y el desempleo, del presidente de la Asociación Latinoamericana de Micro, Pequeños y Medianos Empresarios. Menciona que en este año de crisis se cerraron 500 mil pequeñas y medianas empresas. Una parte de las empresas cerradas se trasladaron al sector informal, o sea que ya no tienen que pagar impuestos, ni seguro social, ni Infonavit. Dice que estos y otros gastos fijos, como electricidad, teléfono y renta del local, ya no permitieron la subsistencia de estas empresas. Agregamos que después del primero de enero, con aumentos al IVA y otros impuestos, más los nuevos aumentos de precios, el número de empresas en esa situación aumentará.

El costo también, dijo, ha sido la pérdida de un millón y medio de empleos. Y, como dijimos, el desempleado reduce su consumo al mínimo, y esto profundiza más la crisis. Los 50 y tantos mil de Pemex y la extinguida Luz y Fuerza del Centro cuentan más que un número similar de los otros desempleados. Esto, porque incluyen en ambos casos a técnicos y profesionistas, cuyo ingreso era mayor que el promedio y cuyo poder de compra, también.

El discurso oficial podrá seguir, como hace un año, diciendo que ahora sí nos estamos recuperando. No les preocupan los millones de desempleados, ni, consecuentemente, las bajas ventas. Incluso ellos causaron directamente, o están causando, el desempleo de más de 50 mil, sólo en el sector energético.

Por si fuera poco lo anterior, suben de precio la gasolina común (la de lujo no subió) y el diesel, necesario no sólo para el transporte terrestre sino para el bombeo agrícola, para los tractores y maquinaria similar, para el comercio marítimo y demás. Por lo mismo, todo esto sube más los precios de los productos para los que estos medios son necesarios, o sea casi todos los bienes y servicios.

Ese aumento de precios, que ya lo estamos viviendo pero que con las medidas mencionadas se va a ir más arriba, es otra medida que favorece a la crisis. El aumento del IVA al 16 por ciento y otras alzas fiscales, también. El dinero alcanza menos. Las ventas disminuyen todavía más.

El primero de enero entran en vigor los aumentos que se acordaron en la Cámara de Diputados, como el del IVA. Eso, más la cuesta de enero posterior a los gastos de fin de año, agrava a partir de ese día toda la situación descrita.

http://www.ref.pemex.com/octanaje/o64/ima/26a.JPG

Esta semana excarcelaron a dos personas implicadas; 21 enfrentarán procesos en libertad

Ni un detenido ya, por muertes en la guardería ABC

Foto
Manuel Rodríguez Amaya, primero de la derecha, padre de Xinuelth Emmanuel, uno de los 49 niños que murieron en el incendio de la guardería ABC, de Hermosillo, cumplió ayer el tercer día de ayuno exigiendo justiciaFoto Ulises Gutiérrez





Ulises Gutiérrez Ruelas
Corresponsal

Hermosillo, Son., 26 de diciembre. Con la excarcelación bajo fianza –el pasado viernes– de Irma Crescencia Díaz, ex coordinadora de guarderías del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Hermosillo, ya no hay detenidos ni presos como parte del proceso federal por las múltiples acciones y omisiones puestas al descubierto tras el incendio del pasado 5 de junio, que costó la vida de 49 niños y lesionó a decenas.

Antes de ella, la noche del miércoles también fue liberado Roberto Copado Gutiérrez, director de Protección Civil Municipal de Hermosillo al momento de la tragedia, quien sólo estuvo encarcelado cinco días luego de perder efecto el amparo que solicitó en junio; y junto a ellos dos, otras 21 personas estarán sujetas a proceso, sin privación de la libertad, además de los cinco dueños de la Guardería ABC que hasta la fecha han eludido la pena corporal.

Crescencia Díaz estuvo presa poco más de seis meses y es quien más sufrió, dado el prolongado encierro, pero salió libre tras el pago de fianza de más de 2.4 millones de pesos que se cubrió con un edificio propiedad de la familia, dado que ella no contaba con recursos económicos ni podía sufragar la cantidad de amparos que otros acusados obtuvieron, comentó Alberto Arellano, uno de sus allegados.

Sin embargo, según los padres de las víctimas integrados al Movimiento Ciudadano 5 de Junio por la Justicia, el proceso federal debe replantearse y la acción punitiva alcanzar a los dueños de la guardería subrogada por el IMSS y a los funcionarios federales y del anterior gobierno priísta sonorense de Eduardo Bours Castelo que resultan responsables.

El homicidio imprudencial debe reclasificarse como doloso para que los acusados no logren la libertad bajo fianza; y los cinco socios de la guardería, Alfonso Escalante Hoeffer, Sandra Lucía Téllez, Antonio Salido Pavlovich, Gildardo Urquidez Serrano y Marcia Matilde Altagracia Gómez del Campo, prima de la esposa del presidente Felipe Calderón Hinojosa, no pueden ser eximidos de culpa, señalan los padres de las víctimas.

No obstante, y aun cuando la Procuraduría General de la República (PGR) informó en agosto que había emitido una ficha roja para la búsqueda internacional y detención de los cinco socios, ellos aparecían en fiestas de alta sociedad en Hermosillo y enfrentarán amparados el inocuo proceso judicial, denunció Julio César Márquez, uno de los voceros del movimiento.

En su más reciente comunicado, el Movimiento 5 de Junio dijo el pasado 11 de diciembre que los padres de las víctimas reiteran su interés en dialogar con el presidente Calderón, a quien intentaron contactar al menos ocho veces, una de ellas por conducto del gobernador panista Guillermo Padrés Elías y otra durante su visita a Puerto Peñasco en noviembre, pero siempre sin éxito.

Los agraviados quieren plantear a Calderón que en el proceso judicial también se persiga el presunto tráfico de influencias y la corrupción que permitieron a los dueños habilitar un bodegón como guardería y operar sin las medidas de seguridad adecuadas, pese a los documentos donde constan las llamadas de atención sobre los riesgos en caso de incendio.

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ACTO DE ACOPIO EN SOLIDARIDAD CON EL SME EN MERCADO INDEPENDENCIA:

SINDICATO MEXICANO DE ELECTRICISTAS
PARTIDO DEL TRABAJO MUNICP. PUEBLA
PARTIDO DEL TRABAJO MUNICP. CHOLULA
COLECTIVO CIUDADANO CARRILLO PUERTO
BANDA RADIO REBELDE ROCK


En días pasados las organizaciones arriba mencionadas desplegamos una serie de actividades en solidaridad con el S.M.E. , que consistió en un evento político-cultural para difundir la lucha de los sindicalistas eléctricos despedidos y hacer acopio de víveres y recursos económicos para continuar la lucha. El evento se realizó en la explanada de entrada del Mercado Independencia al sur de la Ciudad de Puebla.












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Viola amparo concedido a la agrupación Pro San Luis Ecológico

MSX reanuda explosiones en el Cerro de San Pedro

Sin importarle el fallo judicial, y pese a la presencia de turistas, ayer efectuó 6 detonaciones en busca de oro y plata, acusan ambientalistas

Foto
La transnacional Minera San Xavier reinició ayer las detonaciones en el Cerro de San Pedro, pese a que existe un amparo para impedir que la Sedena le otorgue un nuevo permiso de uso de explosivos. En la imagen,aspecto del pueblo, ubicado a las faldas de la colinaFoto Edith Argüelles/ archivo


Edith Argüelles
Corresponsal
Periódico La Jornada
Domingo 27 de diciembre de 2009, p. 21

San Luis Potosí, SLP, 26 de diciembre. Minera San Xavier (MSX) reanudó las detonaciones en la cabecera municipal del Cerro de San Pedro, con lo que violó el amparo concedido a la agrupación Pro San Luis Ecológico el pasado 18 de diciembre, que impide a la firma canadiense utilizar explosivos pese a la suspensión definitiva que obtuvo contra la clausura parcial impuesta por la Procuraduría Federal de Protección al Medio Ambiente (Profepa) el 18 de noviembre.

Vecinos del Cerro de San Pedro confirmaron que este sábado a las 12:15 horas la minera efectuó seis detonaciones en la busca de oro y plata, que representan un exceso frente a las dos diarias que hubo hasta el 13 de noviembre, cuando una sentencia del Tribunal Federal de Justicia Fiscal y Administrativa (TFJFA) emplazó a la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales a retirarle el permiso de impacto ambiental.

Con el retiro del permiso vino la clausura parcial y las detonaciones quedaron suspendidas, aunque la Profepa permitió a la empresa mantener los procesos de lixiviación en sus reservas de oro y plata. El 14 de diciembre New Gold Incorporated, matriz de MSX con sede en Vancouver, Canadá, dio a conocer que obtuvo un amparo contra la interrupción de operaciones, por lo que reanudaría sus procesos a la vez que apelaría de la sentencia del TFJFA.

Pro San Luis Ecológico dio inicio a la secuela de actos jurídicos, al demostrar ante el TFJFA las anomalías y riesgos de la explotación minera en Cerro de San Pedro, pero la MSX obtuvo en el juzgado primero de distrito el amparo en que se basó para eludir la restricción; en respuesta la organización tramitó y obtuvo otro amparo en el juzgado cuarto contra actos del gobierno estatal y la Secretaría de la Defensa Nacional que permitieran a la empresa reanudar las detonaciones.

Hay un desacato abierto a la resolución judicial pues la compañía retomó el uso de explosivos con más fuerza que nunca, sin considerar la presencia de turistas en el municipio y sin respetar las festividades navideñas. Parece que quisieran tumbar el pueblo en abierto desafío a toda institucionalidad, y con el Ejército implicándose en la aventura ilegal, advirtió el presidente de Pro San Luis Ecológico, Sergio Serrano Soriano.

A su vez Carlos Covarrubias Rendón, ex regidor perredista del municipio de San Luis Potosí, dio a conocer que los inconformes promovieron un incidente de violación contra la empresa; y la activista Ana María Alvarado recordó que si bien MSX se amparó contra la clausura parcial, el recurso logrado por los ambientalistas y moradores de Cerro de San Pedro prohíbe el uso de explosivos, pero las autoridades que permitieron su reanudación se comportan como si el fallo no existiera.

MSX llegó al Cerro de San Pedro en 1995 y hasta 2006 inició la extracción de oro y plata a cielo abierto, pero la lucha legal principió hace más de 10 años en el afán de impedir el uso de explosivos y altas cantidades de cianuro para salvaguardar el medio ambiente de Cerro de San Pedro, municipio conurbado a San Luis Potosí.

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El periodista Alejandro Páez usa la ficción para registrar lo que su oficio no le permitía

Corazón de Kaláshnikov retrata una Ciudad Juárez que se perdió

Las historias de tres mujeres se entralazan y le sirven para hablar de lo que le tocó vivir

Foto
Juárez es una ciudad de mujeres; ellas nos han sacado a todos adelante, dijo el autor en entrevista. Arriba, representación de los feminicidios, en una muestra que se realizó en el Claustro de Sor Juana en 2006Foto Cristina Rodríguez


Arturo García Hernández
Periódico La Jornada
Domingo 27 de diciembre de 2009, p. 4

La violencia en la que vive Ciudad Juárez es cotidianamente relatada por la prensa escrita y los medios electrónicos. Pero hay cosas que el periodismo –atado a los hechos concretos– no puede decir, no le corresponde. Para eso está la literatura, que mediante la ficción suele indagar en las razones y sinrazones profundas de los seres humanos para actuar como actúan.

Así lo entendió el periodista Alejandro Páez Varela (Ciudad Juárez, 1968) cuando sintió la necesidad de contar cosas de su ciudad natal que el periodismo no le permitía. Volteó entonces hacia la literatura y escribió la novela Corazón de Kaláshnikov, recientemente publicada por Editorial Planeta. Ahí, el autor da espacio y contexto al ambiente social en que se desarrolla la violencia; rastrea historias de vida, pensamientos, ilusiones y frustraciones de aquellos que en las páginas de los periódicos sólo alcanzan el estato de víctimas o victimarios.

Páez Varela nació, pasó toda su infancia y adolescencia, y vivió parte de su vida adulta en Ciudad Juárez. Lo que registra en su novela es la sociedad juarense de los años 80 y principios de los 90 del siglo XX: No pretendo denunciar, eso lo he hecho a través de mi oficio como periodista; lo que quería era dibujar esos ambientes de los que se alimenta la vida cotidiana de una sociedad y al mismo tiempo recordar una ciudad que se perdió.

Sin embargo –aclara Páez Varela– la violencia en esa ciudad fronteriza no es reciente. Tiene cuando menos 50 años. La novedad es la forma en la que ahora se manifiesta: “Ciudad Juárez no se entiende hoy sólo en el contexto local, sino en el nacional. La violencia actual tiene que ver con una matanza por encargo, una guerra de exterminio de un grupo criminal contra otro, derivada de la decisión poco razonada, del tremendo error de Felipe Calderón, de sacar al Ejército a las calles.

Lo que estamos viendo es un ajuste más sanguinario, porque sabemos el tamaño del negocio y que va a derivar en una masacre que al final del sexenio va a alcanzar 30 mil muertos. Quiero ver qué va a suceder cuando termine el sexenio: si los que desataron todo este desmadre se va a poder ir tranquilamente a su casa.

La referencia a la actualidad era obligada en la entrevista, pero no se refiere a ella la novela de Alejandro Páez. Corazón de Kaláshnikov es una historia de amor, dividida a su vez en tres historias –de tres mujeres– que se entrelazan y sirven para hablar de la ciudad que le tocó vivir al periodista y escritor.

A pesar de todo –dice Páez en entrevista– “en Ciudad Juárez hay lugar para el amor, para vivir, para trabajar. Yo le recuerdo al país que Juárez tiene 50, 60 años con esta violencia, pero ha aprendido a amar, a convivir, a llevar a los hijos a la escuela.

Juárez es una ciudad en la que convergen muchos aspectos, muchos factores: la migración, los grupos de migrantes establecidos, la oportunidad para el tráfico. Esta ciudad expulsó a mi familia hace 12, 15 años, y, eventualmente, cada 30 años expulsa a una clase media, media alta, porque simplemente se vuelve inhabitable para muchos estratos.

Por medio de esas historias, Alajandro Páez también quiere hablar de lo que llama un país de en medio, territorio integrado, de un lado por Coahuila y Chihuahua, y del otro por Texas y Nuevo México.

Es un país de en medio que no hemos terminado de comprender, que comparte muchas cosas, que tiene una dinámica social, cultural y económica propia: No hay que olvidar que hace 150 años a Juárez le arrancaron una colonia, Paso del Norte, que durante 300 años fue mexicana y hoy es una ciudad estadunidense. Es decir, es más el tiempo que fue mexicana que lo que lleva siendo de Estados Unidos, y muchos habitantes de ciudades fronterizas hemos vivido de un lado y de otro, indistintamente.

Narcoliteratura

Las historias de Corazón de Kaláshnikov transcurren en ese país de en medio y lo retratan. El tema no es el narcotráfico, pero aparece porque ese el contexto: “Dentro de 10 años le voy a preguntar a la literatura de Michoacán si no se ve impactada por el fenómeno del narcotráfico que ahora tiene lugar ahí.

“Me rehúso a pensar que se esté haciendo una literatura del narco, eso no existe, lo que hay es una literatura, buena literatura, que se está alimentando de lo que hay alrededor. Por ejemplo, yo no hablo de descabezados, porque esos empezaron a aparecer después; yo narro los años 80 y situaciones muy particulares de ese momento a través de historias de amor de mujeres generosas, luchonas, trabajadoras, mujeres partiéndose la madre.

Juárez es una ciudad de mujeres, por la industria maquiladora, por la prostitución, por los algodonales; todas esas mujeres nos han sacado adelante, han sacado adelante a una ciudad que estaba en el culo del mundo. Al final son historias trágicas, pero me interesaba contarlas.

–La opinión pública del centro, los medios, ¿entienden a ese país de en medio?

–No, estamos muy lejos de entenderlo porque no lo conocemos. Por ejemplo, tanto el indio Ju como Jerónimo anduvieron durante mucho tiempo peleando contra los ejércitos gringo y mexicano, defendiendo su derecho a quedarse en sus tierras, y sus tribus estuvieron durante mucho tiempo en Ojinaga. Sin embargo, no hay una sola línea sobre ellos en los libros de texto de México. Y eran mexicanos y sus descendientes lo son. Y ahí viene otra vez el reclamo: ni el norte ni el sur han sido escritos y reconocidos por la historia oficial.

Entre las razones que impulsan a Ajandro Páez a contar sus historias, está haber nacido en un barrio, del cual “gran parte de sus miembros ya no está. Hace poco conté la historia de un chavo con el que crecí, de pronto su novia le gustó a uno de los jefecillos de por ahí y lo desaparció. A todo el barrio le dolió.

“En otra esquina había una familia de gente buena, que de una u otra manera se fue involucrando con el narco, primero a través del consumo, después de la venta. Ahora algunos están presos y otros ya no están. Cuando volteo y veo hacia atrás, hacia esas familias de gente buena y responsable, en una situación ya incontrolable, me siento obligado a contarlo.”

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Convertirse en universitario 1
Los estudiantes de primer ingreso


Foto: Maricarmen Miranda

Gabriela Cabrera

Cada año, jóvenes procedentes de múltiples sistemas de bachillerato logran un lugar en las aulas universitarias. A diferencia de ciclos anteriores, en éste han hecho una elección de vida que, consciente o no, habrá de marcar su inserción en el ámbito laboral y en su aportación social. Son por lo general adolescentes que traen consigo expectativas de desarrollo personal, académico y profesional y que afrontan el desafío de atravesar la transición bachillerato-universidad construyéndose como personas –y como ciudadanos– en situaciones altamente complejas y diferenciadas en cuanto a los recursos disponibles, sean económicos, afectivos o sociales. Entre ellos se dan diferentes condiciones de desarrollo personal, académico y laboral, dependiendo del nicho socioeconómico y cultural en el que nacieron. Si han tenido un entorno precario intelectual, afectiva y económicamente, es probable que también hayan “aprendido” a esperar el fracaso en sus intentos de inclusión social, o a no esperar nada.

Son jóvenes cuyas trayectorias de vida pueden asumir un futuro delimitado por las estructuras sociales como la escolaridad –seguir el modelo piramidal educación básica a licenciatura o posgrado– y las opciones laborales –empleo, autoempleo o subempleo. O bien, pueden intentar eludir la fuerza de estas estructuras construyendo mecanismos de resistencia, aislándose o manifestando abiertamente su desafío a la sociedad. En todo caso, las actuales estructuras contribuyen a la no inclusión y, a veces, a la expulsión de las y los jóvenes.

La educación superior, entonces, conforma un ideal y una expectativa de desarrollo que, en nuestro país, sólo alcanza el 25% de los jóvenes entre 18 y 24 años de edad.

Ahora bien, el paso de los jóvenes del bachillerato a la universidad nos permite detectar los efectos y condiciones de una transición académica, la cual consiste en atravesar un periodo de cambios más o menos drásticos que impactan su vida personal, familiar, social y, particularmente, académica. Encontramos tres momentos en este proceso: el antes, que ocurre en el último curso del ciclo de bachillerato, cuando los jóvenes toman la decisión sobre su carrera profesional; el durante, etapa de ingreso al primer curso de licenciatura cuando afrontan lo desconocido y, el después, al final o inicio del segundo curso de licenciatura, cuando se han adaptado al nuevo escenario escolar.

Para los estudiantes, transitar con éxito conlleva poner en juego eficazmente su repertorio de conocimientos, experiencias y habilidades sociales, aplicándolo a nuevas situaciones de interacción, implicarse en el establecimiento de relaciones sociales de colaboración, reciprocidad y productividad académica, el pensamiento crítico y reflexivo, la investigación, la solución de problemas y el manejo de las tecnologías de información y comunicación.

No hay que olvidar que los estudiantes afrontan nuevas culturas institucionales y nuevas prácticas educativas. Les corresponde dejar atrás modos familiares de enseñanza y de aprendizaje y un estilo de relaciones profesor-alumno quizá más dependiente y menos autónomo que el que la educación superior requiere y promueve, al mismo tiempo que deben emprender nuevas aventuras de indagación en la búsqueda y construcción de conocimiento; la transición les demanda cambiar de redes sociales y tejer nuevas y, también, dejar atrás a unos padres quizá inquisitivos, desentendidos o preocupados por el futuro de sus hijos que inician la transición universitaria.

A los estudiantes, ¿qué les significa el nuevo ingreso?

Poco después de las primeras semanas en la universidad y al entrar en contacto con los profesionales de la carrera elegida, los jóvenes comienzan el proceso de construcción de su identidad profesional que habrá de consolidarse hasta años después del egreso y tras algunos ensayos de inserción laboral. Es una identidad que han visualizado y, en muchos casos, idealizado antes de ingresar a la universidad, y que al relacionarse con el profesorado, comienzan a conocer como realidad del ejercicio profesional.

Los estudiantes de nuevo ingreso afrontan nuevas culturas institucionales y nuevas prácticas educativas. Para transitar con éxito a la universidad, necesitan poner en juego eficazmente su repertorio de conocimientos, experiencias y habilidades sociales, aplicándolo a nuevas situaciones.

Pero construir una identidad profesional no sólo es labor del currículo –explícito y oculto– de una institución, sino de la práctica de una filosofía y una cultura universitaria, del fomento de hábitos e interacciones sociales aceptados por esa comunidad. Por tanto, no es algo que puede dejarse al buen hacer del profesorado, tutores y orientadores educativos y menos a las propias habilidades de los estudiantes como actualmente se hace, pues implica una política institucional de integración que contenga directrices y perfiles acerca del tipo de alumnado y de profesionales que se busca co-formar y para qué propósito social.

Identificarse con la universidad es también resultado de un proceso de búsqueda de elementos y significados comunes, de puntos de encuentro y diálogo donde el estudiante interactúa y se va reconociendo para finalmente sentirse parte de la comunidad. Ello no necesariamente implica que asuma todos los elementos o atributos de la institución y hay casos en los que el estudiante puede incluso permanecer y sentirse ajeno, condición que probablemente augura una deserción.

Para aquellos que logran adaptarse y son integrados por la institución, la identidad y pertenencia les supone, también, la responsabilidad personal con su formación, con su proceso de convertirse en profesionales y de asumir, a la vez, un compromiso ético con la institución. El estudiante ha de participar en la permanente construcción y consolidación de la institución a cambio del derecho a disfrutar lo que ésta le ofrece; es decir, asumir la cultura interna y la normatividad, participar en la definición del discurso pedagógico institucional y cumplir con su parte de la misión escolar: estudiar para alcanzar una comprensión integral del mundo que le ha tocado vivir y poder forjarse metas académico-profesionales que lo vinculen con la sociedad.


Foto: Sergio Aldama

La educación superior, entonces, conforma un ideal y una expectativa de desarrollo que, en nuestro país, sólo alcanza el 25% de los jóvenes entre 18 y 24 años de edad. Sin embargo, llegar, mantenerse y egresar les supone un esfuerzo intelectual, afectivo y de comportamiento de gran envergadura, particularmente para aprovechar las oportunidades que les brinda la sociedad.

Para los estudiantes esto conlleva fundamentalmente las responsabilidades, derechos y obligaciones que, como miembros de la comunidad educativa adquieren con la Universidad, que pone a su disposición los espacios y las oportunidades de adquirir conocimientos, valores, hábitos, relaciones y proyectos, mediante una infraestructura social, técnica y material indispensable para su formación.

Pero los desafíos no se detienen en ellos. El primer ingreso también plantea retos para la institución y los docentes que, como se verá en una próxima entrega, han de poner su empeño en acogerlos y procurarles situaciones que favorezcan su permanencia y una trayectoria formativa de buena calidad.

Gabriela Cabrera es doctora en Ciencias de la Educación por la Universidad de Barcelona; académica de la DGOSE, UNAM y consejera expresidenta de AMPO, AC.

gabicabrera60@hotmail.com