Ciudad Juárez, Chihuahua
Jueves 21 de agosto de 2008
El presidente legítimo de México declaró que en la agenda nacional del gobierno usurpador están excluidos los graves y grandes problemas que enfrenta el país, como el desempleo, la pobreza, la inseguridad, la corrupción y la impunidad.
* Los índices de violencia e inseguridad no disminuirán mientras no se atienda el origen de ambos flagelos, que es el desempleo, la pobreza y falta de oportunidades a jóvenes, afirma
* El gobierno usurpador debe atender la inseguridad y la violencia, con seriedad, porque nada más se ha dedicado a la faramalla, expresa
* Inicia el presidente legítimo de México, Andrés Manuel López Obrador un recorrido de trabajo por 17 municipios de Chihuahua
Desde esta ciudad fronteriza en donde se ha recrudecido la violencia, Andrés Manuel López Obrador calificó a la sesión de este día del Consejo Nacional de Seguridad Pública como un acto de pura propaganda, de pura demagogia y de pura faramalla.
La inseguridad no se soluciona con un aumento del número de policías y de soldados, ni con amenazas de mano dura, ni con leyes más severas, ni con penas más largas, tampoco “con reuniones demagógicas como la de hoy”, del presidente pelele, Felipe Calderón con los gobernadores y los titulares de las Secretarías de Seguridad Pública y de las Procuradurías, aclaró.
Al iniciar un recorrido de trabajo por 17 municipios del estado, el presidente legítimo de México afirmó que los índices de violencia e inseguridad no disminuirán mientras no se atienda el origen de ambos flagelos, que es el desempleo, la pobreza y la falta de oportunidades de estudio para millones de jóvenes.
Tanto en entrevistas que concedió en Ciudad Juárez y Praxedis, como en las asambleas informativas que sostuvo con los ciudadanos de Guadalupe y Villa Ahumada, declaró que en la agenda nacional del gobierno usurpador están excluidos los graves y grandes problemas que enfrenta el país, como el desempleo, la pobreza, la inseguridad, la corrupción y la impunidad.
En cambio, Calderón privilegia los asuntos que sólo arrojan privilegios a una minoría rapaz, como las reformas a la seguridad social y la aprobación de nuevos impuestos que afectan a los pequeños y medianos comerciantes y empresarios, precisó.
Acompañado por la secretaria del Trabajo, Bertha Elena Luján Uranga, y de dirigentes locales de los partidos que constituyen el Frente Amplio Progresista, López Obrador explicó que esta tarde se reúne Calderón con los gobernadores para supuestamente acordar medidas encaminadas a enfrentar el problema de la violencia e inseguridad que azota al país, pero todo es pura faramalla, reiteró.
Si en verdad –resaltó— quisiera el gobierno espurio enfrentar la crisis de seguridad, debería de retirar de inmediato la iniciativa de reforma energética, que es a todas luces privatizadora.
En Guadalupe, subrayó que el presidente pelele debería otorgar apoyos a los jóvenes y garantizarles oportunidades de empleo y de educación, así como entregar becas a aquellos que estudian el nivel medio superior.
Como tercer punto, “que obviamente no se planteará ni se abordará en la reunión de este día”, Calderón debería solicitarle la renuncia a Juan Camilo Mouriño, porque la titularidad de la Secretaría de Gobernación, que es la responsable de la conducción de la política interna, no puede estar en manos de un delincuente confeso.
De la misma manera, Calderón tiene la obligación de separar de sus cargos al secretario de Seguridad Pública federal, Genaro García Luna, y al procurador General de la República, Eduardo Medina Mora, porque ambos funcionarios ocuparon la dirección de Agencia Federal de Investigación y del CISEN en la administración foxista y desde ese entonces sólo han demostrado ser ineficientes y que carecen de integridad, enfatizó.
En la entrevista que concedió a los representantes de los medios de comunicación en el Aeropuerto de Ciudad Juárez, el presidente legítimo de los mexicanos informó que recorre el país para explicar a los ciudadanos los motivos por los cuales no se debe privatizar la industria petrolera.
Al calificar de lamentable la ola de violencia y de crímenes que se reportan a diario en esta ciudad fronteriza, en donde empieza la Patria, aseguró que la inseguridad es fruto de 26 años de imposición de una política económica neoliberal, antipopular y entreguista, que sólo beneficia a un grupo que no quiere perder privilegios y que mantiene en la pobreza a millones de familias.
“Yo sostengo que el gobierno usurpador debe atender este asunto, el de la inseguridad y de la violencia, con seriedad, porque nada más se ha dedicado a la faramalla; todo es pura propaganda y pura publicidad”, insistió.
Recordó que la paz es fruto de la justicia y destacó la necesidad de cambiar el modelo económico por un sistema que garantice la generación de suficientes fuentes de empleo, buenos salarios y el bienestar de todos los mexicanos, en especial de los jóvenes.
Advirtió que habrá una mayor descomposición social y una mayor desintegración familiar, si no se atienden las causas, los orígenes de la violencia y de la inseguridad.
Cuando los reporteros le pidieron su opinión sobre la participación de efectivos del Ejército Mexicano en las tareas de seguridad pública, López Obrador manifestó su acuerdo, “pero siento que sacaron al Ejército de sus cuarteles sin ninguna estrategia, nada más para hacer presencia, porque no hay ningún plan”.
También le preguntaron si la violencia había rebasado la capacidad de respuesta de las autoridades. Aclaró que sí y resaltó que nunca en la historia de México, después del Movimiento Revolucionario de 1910, se han registrado tantos asesinatos, como en los últimos años.
La situación de inseguridad que impera en todos los rincones de la Nación viene a confirmar que Felipe Calderón no existe, que es un cero a la izquierda y que es un inepto, agregó.
Por la tarde, el presidente legítimo de México se reunió con los habitantes de Villa Ahumada y Galeana, en ambos municipios hizo una invitación al pueblo de Chihuahua para participar en la consulta popular sobre la llamada reforma energética y para expresar su rotundo rechazo al intento de privatizar el sector petrolero, que es patrimonio de la Nación.
Al dar a conocer que ha visitado más de mil 500 municipios de los aproximadamente 2 mil 500 en que está divido el país, detalló que están inscritos 2.4 millones de mexicanos como representantes del Gobierno Legítimo de México y que alrededor de 200 mil brigadistas están dispuestos a defender el petróleo.
También mencionó que el próximo domingo, 31 de agosto, se realizarán asambleas informativas en las plazas de los 2 mil 500 municipios, para dar a conocer el plan de acción que se desarrollará en el momento en el cual los legisladores del PRI y del PAN dictaminen la llamada reforma energética presentada por Calderón o por la cúpula priista.
“Vamos a convocar a una movilización nacional y, si es necesario, vamos a parar al país” señaló.
Por la mañana, el vehículo que transporta a López Obrador se detuvo en el poblado de San Agustín, que se encuentra entre Ciudad Juárez y Guadalupe. Los habitantes del lugar expresaron su respaldo a las acciones de resistencia civil pacífica en la defensa del petróleo y le entregaron a Andrés Manuel López Obrador documentos con las memorias de don Benito Juárez.
Tanto en Praxedis, como Guadalupe, los ciudadanos encargados de darle la bienvenida al presidente legítimo de México, informaron que en ambas localidades estuvo presente el benemérito de las Américas, don Benito Juárez, en su caminar hacia Paso del Norte, hoy Ciudad Juárez.
Para mañana, 22 de agosto, Andrés Manuel López Obrador recorrerá los municipios de Gómez Farías, Temósachic, Matachic, Bachíniva y General Trías.