12 de julio de 2008

Lástima preciosito. No fuiste el héroe de esta película, papá.


Mario Marin, el gober precioso, se llevó una muy bonita protesta cuando en la Casa Lamm, terminaba su discurso de inauguración y se aprestaba a cortar el cordón inaugural con motivo de la semana de Puebla en el DF.

Esta vez, no fueron los ciudadanos quienes tuvieron que ser sacados del lugar. No, ahora le tocó al gober ser sacado del lugar, olvidandose por completo de terminar con sus actividades a realizar con motivo del evento.

Pobrecito de este campeón de la impunidad. Esta vez, no pudo inaugurar el acto ni hacer su brindis con sus preciosas botellas de cognac a lado de toda de su bola de achichincles y lambiscones.


Unos minutos antes, un numeroso grupo de ciudadanos fue llegando de manera escalonada y dispersa al patio de la casa Lamm para así mostrar su repudio por todas las atrocidades cometidas por esta lacra de gobernador.

Ante la presencia de sus invitados lambiscones y los medios vendidos en su mayoría, “el precioso” no pudo soportar las consignas salidas con fuerza de las gargantas de los ciudadanos inconformes y que retumbaban en el patio de la casa, por lo que el susodicho “gober” al sentirse practicamente acorralado por los ciudadanos, tuvó que salir del inmueble literalmente huyendo, rodeado de su grupo de escoltas para así abordar una camioneta que lo esperaba justamente afuera de la puerta principal de la casa.


Aquí va el video ciudadano:


Aquí va el video de la tele:

Pregunta para televisa: Si Allí estuvieron filmando, ¿porqué no lo pasaron en su noticiero estelar? Ah que malpensado es uno. Si los medios para nada que son chayoteros. ¿Verdad?