21 de enero de 2009


■ La resolución del TEPJF, irrespetuosa y contraria al principio de certeza: consejeros

Entre críticas a magistrados avala el IFE nombre de la coalición Salvemos a México

■ Convergencia y PT contenderán con esa denominación en las elecciones de julio próximo

Alonso Urrutia

En medio de inusuales descalificaciones de los consejeros al trabajo del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), el Consejo General del Instituto Federal Electoral (IFE) autorizó el nombre Salvemos a México como denominación de la coalición total con que los partidos Convergencia y del Trabajo (PT) contenderán en las próximas elecciones.

En la sesión del Consejo General del IFE se acusó de incongruente, contraria al principio de certeza y de irrespetuosa la resolución de los magistrados del TEPJF y, en especial, los planteamientos de Alejandro Luna Ramos.

“El respeto que se nos pide para el tribunal electoral –sostuvo el consejero Marco Antonio Baños ante el planteamiento de Convergencia de acatar la resolución– es el mismo respeto que los consejeros exigimos para el instituto”. No existe la pretensión de desacatar la resolución, “pero es un hecho evidente que los consejeros estamos obligados a cuidar al IFE”.

Aún más crítico hacia el trabajo de los magistrados fue el consejero electoral Marco Antonio Gómez Alcántar: “Esta sentencia es violatoria del principio de certeza que deben tener, que regula y rige la vida de todas las instituciones. Tan no tiene certeza, que estamos hoy aprobando una denominación que ya fue aprobada por este mismo Consejo General el miércoles pasado.”

Gómez Alcántar presentó un “voto razonado” en el cual advirtió acerca de la “incorrecta” decisión del TEPJF, en la que se hacía caso omiso de la decisión adoptada por el IFE, la cual, por mandato de los magistrados, debió reponerse este martes: esto es que el nombre de Salvemos a México que avalaron entonces, fue aceptado ayer una vez más.

Menos directo en su intervención, el consejero Virgilio Andrade manifestó que el IFE estaba acatando la decisión del TEPJF, aunque “desde el punto de vista jurídico pudo haber tenido un sentido distinto y hubiera podido considerar nuestro acto que habíamos tenido el día anterior (el TEPJF virtualmente anuló la decisión del IFE al día siguiente que se aprobó el nombre de Salvemos a México) para reconocer el nombre de la coalición y al mismo tiempo nosotros pudimos haber dado por acatada la sentencia sin siquiera venir a sesionar al Consejo General.”

El IFE, continuó Andrade, “parte de la premisa que es absolutamente inexorable: las resoluciones del tribunal son siempre acatadas, independientemente de su contenido, de sus contradicciones o de sus ambigüedades”.

En el mismo sentido se pronunció el consejero Arturo Sánchez, quien puntualizó que no es intención del IFE desacatar la resolución sino precisar dos aspectos centrales que fueron erróneamente valorados por el TEPJF.

“En ningún momento, ni en los documentos, nosotros dijimos que la decisión que adoptábamos el 14 de enero –en la que aprobaron el nombre Salvemos a México– la tomábamos ad cautelam. No lo hemos hecho nunca y no lo vamos a hacer ahora.”

Descalificó los señalamientos del TEPJF de que en aquella sesión el IFE haya avalado el nombre de una coalición sin la presentación de las firmas requeridas que hicieran oficialmente válida la solicitud de PT y Convergencia. Las firmas fueron entregadas y cotejadas por el instituto para validar la decisión que se adoptó.

El debate sirvió para que Convergencia desahogara su enojo contra los consejeros, amparado en la resolución del TEPJF. Los representantes de este partido ante el IFE, Elías Cárdenas y Gerardo Tapia, cuestionaron las críticas que hacían los consejeros a los magistrados, al subrayar que éstos sólo le habían dado la razón a la coalición.

Cárdenas señaló que inclusive con el plazo de 48 horas que les dio el tribunal había subsanado las condiciones adversas con que el IFE les había obligado a proponer un tercer nombre alternativo para su coalición.

Valdés elude involucrarse

En este contexto, el consejero presidente del IFE, Leonardo Valdés Zurita, decidió no involucrarse en el debate ni acompañar las críticas de sus colegas a los magistrados del TEPJF, y se limitó a señalar que las sentencias del tribunal son inatacables y deben ser acatadas en sus términos.

Sin embargo, se dijo respetuoso de todas las opiniones vertidas por los consejeros durante la sesión e incluso, entrevistado al término de la reunión del Consejo General del IFE acerca de su postura respecto de las formas utilizadas por los magistrados, respondió: “No quisiera opinar, porque eso no ayuda al buen desarrollo del proceso electoral. Respeto las expresiones de todos los magistrados y de mis compañeros.”

Finalmente, a propuesta de los consejeros Gómez Alcántar y Macarita Elizondo, se aprobó el nombre de Salvemos a México para la coalición formada por Convergencia y PT, con el matiz de que el IFE votaba una decisión para corroborar la adoptada el 14 de enero.

Con esto se pretendía salvar el sentido de la sesión del pasado 14 de enero y no solamente omitir, como hizo el tribunal electoral, su existencia.

■ La salida de su grupo del Partido del Trabajo será gradual, sostiene

José Narro negocia con Ortega acuerdo político electoral, incluidas candidaturas

■ Dos diputados petistas se integrarán a la bancada del PRD; falta formalizar detalles

Alma E. Muñoz y Enrique Méndez

José Narro Céspedes, aún integrante del Partido del Trabajo (PT), confirmó ayer que establecerá un acuerdo político electoral con Jesús Ortega Martínez, presidente nacional del Partido de la Revolución Democrática (PRD), en el que se incluya la solicitud de candidaturas plurinominales para diputados federales y por mayoría relativa, así como espacios en los órganos de dirección del sol azteca.

Asimismo, agregó, que se privilegie la unidad de las izquierdas, por lo que no descartó que en los estados donde habrá elecciones concurrentes se impulsen candidaturas comunes con la gente de Alberto Anaya, presidente nacional del PT. Narro Céspedes acudió a las oficinas del PRD para trabajar acerca de ese acuerdo político electoral con Ortega y expresó su confianza en que esté listo esta semana.

En tanto, los diputados federales del PT Joaquín Vela y Pablo Arreola se integrarán al grupo parlamentario del PRD, una vez que se formalicen los detalles del paso de militantes de aquel partido al sol azteca.

Vela aseguró que además se negocia con otros dos diputados petistas su paso al PRD, lo cual dejaría a la bancada con siete de sus 11 integrantes.

Al respecto, el coordinador de la bancada petista, Ricardo Cantú, aseguró que legisladores perredistas, entre ellos el senador Salomón Jara, han expresado su interés de dejar el PRD para pasarse al PT.

Acerca de la decisión de Vela y Arreola, señaló: “No sabía que teníamos chuchistas de clóset. Ya se salieron del clóset y si ellos creen que es lo correcto, está bien, México es un país de libertades y cada quien se asocia con quien considera tiene una causa común.”

Narro, por su parte, precisó en entrevista que la salida de su grupo del PT se realizará de manera paulatina y dependiendo de las circunstancias que se vivan en cada estado donde tengan representación, aunque no definió si la integración a las filas del PRD sería inmediata.

“Es un proceso gradual de integración y de acercamiento con el PRD, no es en automático, es algo que se viene construyendo.”

Rechazó que su decisión de no renunciar al PT sea condición para que Ortega cumpla con lo que se establezca en el acuerdo que firmen.

“No es un problema de mercancía, no estamos mercadeando, es un proyecto de principios” después de ver que el proyecto del PT se ha desvirtuado con Alberto Anaya, sostuvo.

■ Los paros técnicos para reducir la producción no evitaron el recorte, informa líder sindical

Despedirán a 900 empleados eventuales de la planta Volkswagen en Puebla

■ Teme representante gremial que haya ceses también en personal de base por las bajas ventas

Tania Damián (La Jornada de Oriente)

Puebla, Pue., 20 de enero. La planta automotriz de Volkswagen (VW) decidió despedir a los 900 trabajadores eventuales con que cuenta, quienes llevaban de seis meses a cuatro años en la empresa.

Esta medida se tomó debido a las bajas ventas registradas en los últimos meses por la crisis económica, informó el secretario general del Sindicato Independiente de los Trabajadores de la Industria Automotriz Volkswagen (SITIAVW), Víctor Cervantes Rosas.

Estos 900 trabajadores se suman a 350 obreros eventuales que fueron despedidos de manera paulatina en los últimos meses de 2008.

El secretario general del SITIAVW manifestó que dicha situación enciende “los focos rojos” porque al ya no haber personal temporal, en caso de que las condiciones económicas no mejoren, habrá despidos entre los 9 mil 400 trabajadores de planta.

La determinación de rescindir a todos los trabajadores eventuales se da en el marco del segundo día de paro técnico de VW, el cual concluirá este miércoles como una medida para reducir la producción en 5 mil unidades.

En conferencia de prensa, el dirigente dijo desconocer si todos los despedidos dejarán de laborar el próximo 31 de enero, fecha en que vence el contrato de la mayoría de los eventuales.

Señaló que será hasta este viernes cuando se conocerá el número de trabajadores contratados temporalmente que saldrán de la planta a finales de enero, ya que el procedimiento administrativo de finiquito tarda de tres a cuatro días. Por lo que en caso de que no salgan los 900 en este mes, los obreros restantes saldrán en febrero o marzo, pero lo que es un hecho es que “sí van a salir y no puedo engañar que se quedarán”.

Reconoció que la situación económica es muy precaria para miles de familias y que debido al despido por parte de la empresa, 900 familias se quedarán sin su sustento principal.

“No quiero ser pesimista, pero hay más posibilidades de que la situación empeore en lugar de que mejore, por lo que este tipo de decisiones podrían afectar hasta el personal de planta”, señaló.

Sin embargo, desconoció el número de personal de planta que podría ser rescindido por parte de la armadora alemana, sólo aseguró que en caso de suceder, saldrán los empleados con menor antigüedad en la empresa.

Situación preocupante

Cervantes Rosas refirió que es preocupante que ya no haya personal eventual porque las experiencias pasadas demuestran que “siempre hay despidos de empleados de planta”.

Recordó que en 2003 cerca de 4 mil personas de base fueron despedidas de la planta, cuando ya no había personal eventual.

Por último, dijo que diversos sindicatos poblanos se reunirán con el secretario de Trabajo y Previsión Social, Javier Lozano Alarcón, con el fin de acceder al programa federal de Preservación del Empleo, que consiste en recibir un día de salario mínimo por día laboral en paro.

Epílogo · Rocha

Rocha

Luis Linares Zapata

El católico señor Calderón

El Vaticano envió a este país de otrora sumisos oyentes a sus maniobreros de alto rango para transmitir, con precisa corrección, sus anticuados e injustos criterios sobre la familia. Varios cardenales y rotundos obispos hicieron gala de sus maneras de comportarse en distantes estrados, ordenar y vestir con gala y dispendio. Fue una fiesta diseñada para el despliegue de la alta burocracia eclesiástica, fuera nacional o salida de la misma curia romana. La intolerancia, el fundamentalismo y el desfase de la realidad fueron los distintivos impresos después de varios días de cónclave. Y no sólo eso, sino que la acompasaron con otras visiones tanto o más inaceptables: sobre la mujer, el Estado laico, la cultura (evangélica la llamaron) y la homosexualidad, entre otras cuestiones centrales.

El Vaticano quiere apropiarse del núcleo básico de la sociedad como su distintivo señero sin detenerse a pensar que existía antes de la Roma histórica y, con segura esperanza, prevalecerá sobre su final desvanecimiento. Desde su muy particular sello reaccionario pretende definir su comportamiento, valores y normas, todo ello dictado por las concepciones que ha pergeñado desde hace centurias. La clerecía desea situarse en el centro del debate y ser, de nueva cuenta, árbitro indisputable e infalible de la disputa, el sanctórum que diga la primera, la siguiente y última palabra, la que formule las sentencias e imparta absoluciones urbi et orbi a los pecadores. Sesgan, de su definición familiar (padre-madre e hijos) a, cuando menos, un cuarto de los hogares monoparentales (madres solteras e hijos). Nada dicen de la común violencia que se despliega en su interior.

Pero la curería de elite también afirma que las mujeres son las que, con sus modas y formas provocativas de conducirse, incitan a los hombres para que las agredan o falten al respeto. El recato, la discreción y la obediencia deberán ser sus patrones de conducta. La homosexualidad, para esta clerecía, es una desviación malsana y no puede ser reconocida y menos integrada a la convivencia social. Puede, tal vez, ser practicada en lo íntimo. Pero de ello se tiene que dar cuenta en la confesión, es decir, es materia de pecado grave. Al pronunciar tan rotundas como hipócritas sentencias se muerden la lengua (o la cola) y olvidan a incontables correligionarios que ven al prójimo (hombre, niña o niño) con una mirada lasciva y perversa y acuden, presurosos, a ocultar sus tropelías y delitos.

Pero los diplomáticos enviados por el Papa alemán no se detienen en las minucias mencionadas. En el fondo, también desean darle un zarpazo más al Estado laico, su peor enemigo. La iglesia romana no ha quitado el dedo de este molesto renglón desde que la modernidad los arrasó. Lo sigue combatiendo con todas sus fuerzas disponibles. Quiere volver a tener la capacidad decisoria que, hace ya varias centurias, tuvo sobre creyentes, gentiles y soberanos. No se resigna a ocupar el lugar que la conformación de los estados actuales le deparan: ocuparse de los sentimientos de trascendencia, es decir, la íntima religiosidad de las personas. Saben, porque lo pueden hasta medir, que las sociedades siguen una ruta cada vez más secular y van formando nutrido rebaño, alejado de los mandatos, prédicas, bulas y encíclicas que tan a menudo lanza desde su sede romana.

La Iglesia católica ha puesto mucho de su parte para alejar de su seno a los otrora creyentes. Es notorio su desfase respecto de las conductas y valoraciones que van adoptando los distintos pueblos de todos los países. México no es excepción.

En este contexto se dio la presencia del señor Calderón en tal evento confesional. Hizo, para tan solemne ocasión, gala de su catolicismo provinciano y recibió su título por aclamación: “presidente católico”. Citó, para subrayar su entrega y pertenencia de credo, todo un santoral: su mal catalogado patrono y a los santos colectivos a los que describió como mártires de la persecución, es decir, los cristeros que mataban en el nombre de su Cristo.

Nunca estableció Calderón su distancia como jefe de un Estado laico, logrado a golpes de sangre, decisión y valentía por parte de varios miles de mexicanos, entre los que no se cuenta él mismo. Su actitud fue la de uno de tantos asistentes, feligreses sumisos a los dictados de su jerarquía. Ahí, cardenales y obispos hicieron gala de sus potestades que reclaman divinas. Curas privilegiados que lucieron, con el desparpajo acostumbrado, sus ornamentadas vestiduras, sus joyas, símbolos inequívocos de poder y riqueza. Siguen permitiendo o solicitando ante su presencia, genuflexiones y besos de anillo y mano, tal como lo obligaron a partir de la Edad Media.

La administración del señor Calderón, con seguridad, captó el mensaje de su jefe. Y lo usará para reafirmar los rasgos que ya la distinguen. Quizá por esas mismas razones y pareceres es que los panistas se desfasan tan a menudo y cancelan, por decreto local, los besos. O le exigen, a cualquier ciudadano, para identificarse, la fe de bautismo como sustituto del acta de nacimiento.

Parten, burócratas y políticos panistas, del citadino preconcepto según el cual todos los mexicanos confiesan la misma religión. Se olvidan, o desconocen, que hay muchos pueblos abandonados que no cuentan con los servicios de un párroco o notario público que actualice las actas que catalogan como viejas. Esta actitud monacal de los panistas se ha ido trasluciendo en sus maneras de gobernar. Se hacen más recalcitrantes cuando se declaran creyentes, cuando creen ser portadores de los valores tradicionales de la familia mexicana, cualquiera que esto pueda significar en el Guanajuato o en el Jalisco de las mafias extremistas que ahí se han entronizado.

Poco a poco, paso a paso, dicho a dicho, el señor Calderón va sembrando lo que él y su partido habrán de cosechar en poco tiempo.

Se va el junior · El Fisgón

El Fisgón

Astillero

Julio Hernández López
Fax: 5605-2099 • juliohdz@jornada.com.mx

■ ¿Tiempos nuevos?

■ Cromática política

■ Primavera católica

Ampliar la imagen ADIÓS A ZAPATAZOS. Para despedir el régimen de George W. Bush, denominado el peor presidente estadunidense de todos los tiempos, niños, jóvenes y adultos se reunieron frente a la embajada de EU en el Distrito Federal y lanzaron zapatos y tenis contra la sede diplomática ADIÓS A ZAPATAZOS. Para despedir el régimen de George W. Bush, denominado el peor presidente estadunidense de todos los tiempos, niños, jóvenes y adultos se reunieron frente a la embajada de EU en el Distrito Federal y lanzaron zapatos y tenis contra la sede diplomática Foto: José Carlo González

Una euforia cosmética recorre Estados Unidos, esperanzado el imperio decadente en resurrecciones y mejorías a partir de cambios en la pigmentación corporal de quien ha llegado al punto más alto de la estructura formal cuyo asiento escenográfico está en la Casa Blanca. El entusiasmo mediático que provoca Obama es proporcionalmente inverso a las primeras reacciones que le ofrecen los nichos reales de poder: las bolsas de valores y los grandes capitales le saludan con pérdidas que constituyen medidas de apremio para que el Hombre del Momento apruebe paquetes económicos de ayuda a gusto de quienes medraron durante décadas al amparo de las teorías de la libertad de mercado que hoy esconden con premura entre las solicitudes de dinero público para solucionar crisis de capitales privados; otra bienvenida emponzoñada le fue preparada en Gaza, donde los barones de la guerra desplazaron hasta extremos de barbarie la política aliada de Estados Unidos e Israel para impedir que, al llegar a la silla ceremonial de mando, el presunto abanderado del cambio pudiera caer en las tentaciones de retroceder o modificar puntos esenciales.

El tamaño de la esperanza puede ser también el tamaño de la decepción. Obama será mejor presidente que Bush casi por imperativo de la naturaleza, pues sólo esforzándose con gran oficio le sería posible a una persona ilustrada y con sensibilidad política y social, como lo es el nuevo presidente de Estados Unidos, caer en los abismos humanos en los que se regocijó el gran criminal texano. Pero no son las buenas intenciones las que cambian por sí mismas las realidades estructurales, y mucho menos si son de la dimensión y complejidad que vive en este momento el imperio desfondado (aun cuando la formación intelectual es diametralmente opuesta entre Obama y Vicente Fox, es difícil no recordar las expectativas sin fundamento que generó entre masas mexicanas ávidas de cambios mágicos el merolico del Bajío que acabó hundido en la corrupción). El color de la esperanza es, irónicamente, negro, y no sólo por la piel del nuevo poderoso de la tierra, sino porque de la resolución de los graves problemas económicos y sociales de la nación hasta ahora globalmente rectora dependerá la eventual recuperación de los países que le son subordinados, México de manera destacada entre ellos. Prudencia y sensatez serán necesarios para acompañar y entender el difícil proceso que le espera a Obama, sabedores todos de que el poder real del imperio no está en sus figuras públicas ni en sus criaturas mediáticas (por cierto, el grado de complicidad o complacencia de Obama con el pasado inmediato podrá ser medido a partir de la respuesta que dé a la exigencia del relator especial de Naciones Unidas sobre casos de tortura, Manfred Nowak, quien desde Berlín ha dicho que “hay pruebas suficientes” de la comisión de esos abusos extremos en Guantánamo y que los responsables, que deben ser enjuiciados, son el propio Bush y quien fue su secretario de defensa, Donald Rumsfeld. Si el nuevo mandatario desea enterarse del alto costo adverso que conlleva el encubrimiento del antecesor puede preguntarle a Calderón respecto a Fox, esposa y familiares).

El Teatro de la República, en Querétaro, también puso en escena su nueva producción, el monólogo expansivo del cardenal Tarcisio Bertone, secretario de Estado del Vaticano que gracias a las indulgencias históricas del panismo gobernante lanzó un llamado a la evangelización de la cultura y abogó por la instalación de contenidos abiertamente católicos en las universidades mexicanas ni más ni menos que en el histórico escenario constituyente al que el propio funcionario extranjero llamó “lugar sagrado del laicismo”. La avanzada ideológica de las fuerzas vaticanas pronunció su nuevo Plan Educativo para México en terreno altamente propicio, pues el gobernador Francisco Garrido, el presidente del municipio de la capital, Manuel González Valle, y el obispo Mario de Gasperín han fortalecido el conservadurismo y la intolerancia. La conferencia del cardenal Bertone, sobre asuntos de educación y cultura, fue la primera acción práctica desprendida del Encuentro Mundial de Familias que recién concluyó y a la que se sumó y encomió el jefe formal del Estado mexicano. A la sesión católica de Querétaro fue convocada la República de las Universidades Privadas Católicas, la intelectualidad relacionada con esa visión del mundo, el Estado Mayor Obispal, monjas en traje de faena y políticos panistas. En respuesta a preguntas del público que fueron debidamente seleccionadas por el “periodista de la fe”, Jaime Septién, Bertone convocó a que se desate “una primavera de los laicos católicos”. Antes, el filósofo Rodrigo Guerra, al presentar al conferencista, había denunciado que los católicos sufren la “intolerancia de los tolerantes” y convocó a los presentes a un nuevo “protagonismo cristiano”. Todo bajo los nombres, escritos en letras de oro en los muros de honor, de los mexicanos que redactaron la Constitución vigente.

Astillas

Jesús Ortega asegura que Andrés Manuel López Obrador votará por el PRD el próximo julio. Las palabras del Chucho Mayor parecieran sugerir que se ha llegado a un acuerdo en el partido del sol azteca para que en su interior se resuelva la lucha por candidaturas a diputados federales, con lo que los partidos Convergencia y del Trabajo no recibirían el flujo electoral derivado del ex aspirante presidencial. El jaloneo por las postulaciones está en su mero apogeo y todo hace suponer que el tabasqueño repartirá su influencia política entre la casa original, pintada de negro y amarillo descascarados, y sus nuevos aliados electorales que también piden pruebas de amor en las urnas... Y, mientras el IFE y el tribunal electoral federal siguen en sus pleitos de cúpula, dedicados a la contemplación de sus mundos de miniatura, sin darse cuenta de que forman parte del museo político de la inutilidad y que su credibilidad cae constantemente, ¡hasta mañana, en esta columna de color!